Según Henry Jenkins: "La narrativa transmedia representa un proceso donde los elementos integrantes de una ficción se dispersan sistemáticamente a través de múltiples canales de distribución, con el objetivo de crear una experiencia de entrenimiento unificada y coordinada".
Hoy en día, con la facilidad de acceso a las nuevas tecnologías, el fenómeno de la narrativa transmedia se está extendiendo por toda la sociedad con gran celeridad. Es un nuevo lenguaje en el que confluyen distintas aportaciones procedentes de diversos medios y que generan un producto que más allá de su calidad puede ser elaborado por cualquiera de nosotros. Jenkins establece 4 consejos extraídos de la 4th "Futures of Entertaiment" Conference en relación a la narración transmedia:
1- Las historias deben ser penetrantes. Destaca la importancia de crear narrativas capaces tanto de difundirse fácilmente como de calar hondo en el receptor.
2- Cada porción de una historia ha de ser enriquecedora, pero no esencial, para la experiencia global.
3- Conviene que los creadores comiencen a considerar a sus fans, siempre que estos ya existan, como cocreadores de sus narrativasen lugar de como barómetros.
4- En última instancia, el objetivo no es crear sólo una historia, sino también un mundo alrededor de ella.
Las nuevas formas de comunicación están contribuyendo enormemente a cambiar el modo de crear, experimentar y compartir historias. La creación cultural se va universalizando cada vez más. El caso de un niño de 13 años de Tarragona, Pep Domèmech Gil, es paradigmático en este tipo de creaciones. Utiliza diferentes recursos expresivos para elaborar un contenido que es una mezcla de todo lo anterior. Jenkins dice que "cada vez son más los expertos en alfabetización que reconocen que representar, recitar y apropiarse de elementos de historias preexistentes es una parte valiosa y orgánica del proceso de alfabetización cultural de los niños." De esto se desprende que la narrativa transmedia está llamada a ser un punto fundamental en la formación de los niños, les dota de unas habilidades expresivas muy importantes a través de la sincronización y la guionización.
Jenkins también escribe: "La capacidad de participación no proviene de destruir la cultura comercial, sino de escribir sobre ella, modificarla, corregirla, expandirla, conferirle una mayor diversidad de perspectivas, y luego volver a ponerla en circulación, reintroduciéndola en los medios dominantes." La utilización de fuentes que provengan de obras ya comercializadas no debe ser obstaculizada. Al contrario, se debe fomentar para así incentivar la creatividad y el ingenio de aquellos que tengan inquietudes artísticas.
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